Compartimos, pero con condiciones

La aparición, y sobretodo la consolidación, de los blogs ha supuesto una revolución en la forma de entender la comunicación. Ahora es más fácil acceder a cualquier dato con hacer un sólo "click" del ratón, por esto misma razón cualquiera puede obtener información desde el salón de su casa, sin necesidad de tener que ir al quiosco.

Todo esto parece muy positivo, ya que todo el mundo sale beneficiado y hay un incremento de la libertad de información, sí es cierto. Pero no es oro todo lo que reluce, todo esto ha provocado la aparición de problemas relacionados con la propiedad intelectual. Alguien puede entrar en tu blog y "plagiar" lo que has escrito, saliendo totalmente inmune.

Para evitar esto último se creó Creative Commons, que te permite elegir entre diversas licencias. Una de ellas avisa de que está prohibido copiar información del blog, algo que en principio para nosotros no tiene gran interés porque a no ser que tengamos un gran ego o creamos que somos una especie de William Shakespeare de los blogs, con 23 años debería ser un honor que alguien se base en lo que escribimos para desarrollar sus escritos o páginas.

A nosotros ahora nos interesa compartir información, pero una cosa es compartir y otra muy diferente es ser un "pringado", por ello Creative Commons te permite la posibilidad de elegir un tipo de licencia que no prohibe la copia, pero si que obliga a la otra persona a decir de donde ha sacado la información.